Buñol. Calle Mendez Nuñez (cuesta del castillo):
Pintura al óleo sobre lienzo de 33 x 46.
Este bello cuadro donde se contempla una panorámica del casco viejo de Buñol, con el puente que da entrada a la Plaza de Armas y la Torre Norte de su Castillo, representa una de las calles más transitadas y emblemáticas de dicha zona, por ser acceso directo del pueblo con las Ventas y viceversa, parte alta del mismo, ya que Buñol está situado en la profundidad de su valle con una orogafía complicada, lo que lo hace más atractivo, si cabe, pero también le obliga a tener un desnivel muy acusado entre ambas zonas, y parte de sus calles estrechas y empinadas. Esta concretamente, Mendez Nuñez, posee una pendiente bastante considerable haciéndola peligrosa, y para ciertas edades, casi intransitable.
Esta obra, no es tan secilla de realizar como parece a simple vista, precisamente, esa pendiente de la calle, de la que hablaba anteriormente, va estrechando y bajando las cornisas de las viviendas del lado superior a ambos lados casi tocando el punto de horizonte (parte central y alejada del encuadre), y para complicarlo más, haciendo curva dicha calle. Por tanto, hay que hacer un buen dibujo, teniendo en cuenta todo lo referido y las proporciones para obtener un aceptable resultado. Esta es mi humilde opinión.
Yolanda Caballero Palomar
Yolanda, esta preciosa joven de la foto, ataviada con el traje de buñolera, es la mayor de mis cuatro nietas, a la que dedico mi siguiente poesía con motivo de su 18 cumpleaños. Estudia primero de bachiller en el I.E.S. La Hoya de Buñol, además de quinto curso de música de grado medio en el Consevatorio Profesinal Mariano Pérez Sánchez de Requena (Valencia). También forma parte de la plantilla de músicos como clarinete tercero, de la Banda Sinfónica La Armónica de Buñol."El Litro".
TU CUMPLEAÑOS
Hoy diecisiete de Enero
Cumples, vida mía dieciocho años
Y con ellos la mayoría de edad
Yolanda Caballero Palomar.
Que lejos quedan los versos
Aquellos que te hacían soñar
Con princesas y castillos
Y caballitos de mar.
Atrás quedó tu tierna infancia
La de juegos y ternuras
Viendo pasar los días
Saboreando alegrías.
La vida te hizo ser
Madura antes de tiempo
Y fue forjando tu ser
De nobles sentimientos.
Hoy te contemplo emocionada
Recordando a la niña de ayer
Mi bella "golondrina errante"
Que cada día me venía a ver.
Ahora transformada en mujer
En una mujer preciosa
Comprensiva, educada, cariñosa
Increiblemente bondadosa.
Abrazan mis pensamientos
Los días mejores de mi vida
Junto al yayo que tanto querías
Y en el calor de tu compañía.
¡Por qué tú. mi querida nieta
Eres mi mayor riqueza
Mi más grande tesoro
Y como a mis hijos te adoro!
Pero han pasado los años
Has crecido y a pesar mío te pierdo
Pero siento que cuando te necesito
Vienes a mi lado corriendo.
Yo quisiera en este día
Hacerte el regalo que tu anhelas
Pero yo sólo tengo mis versos
Sólo puedo darte mis poemas.
Hoy quiero del alma serenamente
Agradecer a Dios por tenerte
Por llegar hasta aquí contigo
Marcando nuestros pasos el camino
Que juntas tú y yo recorrimos.
Fina