Mis poemas no guardan la métrica ni son modelo de rima, mis poemas son entrañables, son como la vida misma.

jueves, 4 de julio de 2013

UNA DE MIS OBRAS PICTÓRICAS, TEXTO DE 1778 Y YO ESCRIBO (POESÍA).

 
San Jorge Mártir: Pintura al óleo sobre lienzo de 38 x 55.
 
 
Por segunda vez la obra de San Jorge en una nueva versión, es protagonista de este blog y predilecta honorífica de mis trabajos, puesto que casi todos los artistas dedicados a la pintura, no somos partidarios de repetir las obras, pero en este caso, yo, ha podido más el amor junto al embeleso de la contemplación de su Divina figura que desde el primer momento me cautivó, que ese, llamémosle enigma, que nos lleva a no crear el mismo modelo por segunda vez.
 
En esta nueva creación de la obra, solamente se diferencia con la anterior en el tamaño (mayor) y en la pigmentación del fondo (parte superior), en este caso con una tonalidad predominante en amarillo cadmio difuminado con el azul del cielo, lo que intenta expresar el resplandor que emana del Santo casi por completo.
 
En la entrada anterior con la primera obra, añadi de este santo venerado su biografía a grandes rasgos, incluso la poesía que le dediqué con mi admiración y el enorme placer de su bien lograda creación, estando plenamente convencida de que en ella se obró un milagro otorgado por Él en la firmeza y seguridad de mi mano; pero en esta ocasión, me nace insertar un fragmento de un texto de 1778 sobre su vida y martirio respetando la ortografía propia del lenguaje de la época.


SAN Jorge, uno de los mas célrbres "Mártyres de la Iglesia à quien los Griegos llamaron por excelencia el gran Mártyr, nació en Capedocia de familia ilustre y distinguida por su nobleza pero mas señalado por el zelo en que profesaba y defendía la verdadera Religión.
 
Su calidad y distinción le precisaron à seguir la profesión de las armas; y como era un joven de los mas bien dispuestos, mas valiente, y mas cultivados de todo el exército, ganó en poco tiempo la gracia del Emperador Diocleciano, quien le dio una Compañía, y le hizo su "Maestro de Campo. Acreditó el acierto de esta elección el valor, la prudencia y toda la conducta de su porte, en una edad tan poco abanzada. "Y descubriendo cada día el Emperador mas y mas las prendas, los fondos y el extraordinario mérito del nuevo Oficial, pensaba elevarle à los primeros cargos, colmandole de favores, cuando comenzó à descubrirse la tempestad que desde algunos años antes se iba fraguando contra los Cristianos, y desde los primeros anuncios se comenzó à temer, que al cabo inundaria en sangre de "Martyres a toda la Iglesia de Dios.
 
Desde entonces, aunque Joege tenía solos veinte años, se consideró como víctima destinada al sacrificio, y dispuso para él con el exercicio de las mas heroycas virtudes. Como tenia el grado de Oficial General, era del Consejo del Emperador, y conoció que esto le obligaria à declararse de los primeros, dando pruebas de su fé y no disimulando su religión. "Hizo sacrificio de su bienes antes de llegar el caso de hacer el de su vida. Y hallandose heredero de una rica sucesión por muerte de su madre, la repartió toda entre los pobres: vendió sus preciosos muebles, sus ricos vestidos, y distribuyó el precio entre los fieles, que al primer ruido de la persecucion, se habían esparcido aquí y allí, dando libertad a sus esclavos...
 
 
YO ESCRIBO...
 
Yo escribo a la vida
A mi pueblo y a la flor
A la felicidad perdida
Escribo versos de amor.
 
Yo escribo al niño que nace
Que abre sus ojos a la luz del sol
A la madre que en sus brazos lo mece
Entre rezos y plegarias de amor.
 
Yo escribo a mis hijos y nietas
A todo lo bello de mi alrededor
Y del alma nace cada letra
Porque escribo con el corazón.
 
Yo escribo a los mayores
A los abuelos en soledad
A sus ojos tristes y cansados
Con lágrimas de infelicidad.
 
Yo escribo para no llorar
Para no sufrir, para no pensar
En la pérdida de mi otra mitad
Que se fue y ya nunca volverá.
 
Con el pensamiento volando
Con la pluma y los pinceles en la mano
Voy alternando, escribiendo y creando
Dulces poesías y bellos cuadros.
 
Suspendida en el aire siento
Que hay otra dimensión
Se me ensancha el corazón
Y todo mi ser se conmueve.
 
Yo escribo al amor, palabra divina
Que encierra del alma lo más bello
Amor a la vida, al mundo entero
Cuatro sílabas de una dulce sinfonía
Que al oírla te eleva al cielo.
 
Fina
 
 
 


martes, 2 de julio de 2013

UNA DE MIS OBRAS PICTÓRICAS Y EL SOL VOLVERÁ A BRILLAR (POESÍA).

 
Amanecer en alta mar: Pintura al óleo sobre lienzo de 38 x 55.
 
 
Este paisaje marítimo donde se refleja un espectacular amanecer, que a su contemplación transmite paz y armonía, también pudiera inspirar alguna historia fantástica de pirartas en busca de tesoros o posesiones. Todo esa mezcla de sentimientos a la hora de crear una obra, ayuda a establecer contacto visual profundo con la misma, formando parte desde el primer momento que se inicia, no sólo físico sino mental para una lograda terminación.
 
Para realizarla con éxito y a mi modo de verlo, hay que tener en cuenta la perspectiva global de la misma para darle la luz del amanecer contrastada con la oscuridad de la noche en sus últimos estadios, de ahí el realce de las nubes con tonalidades oscuras (pigmento morado) que destaca sobre la claridad del cielo en la parte superior, color que predomina en las velas del barco e incluso en el mar.
 
 
EL SOL VOLVERÁ A BRILLAR
 
Lluvia que intermitente
Te muestras en la vereda
Refrescando el ambiente
Y empapando la tierra.
 
Lluvia que tras la ventana
Tu cortina improvisada
Con su blancura inmaculada
Se interpone en mi mirada.
 
Lluvia que en esos días tan grises
Tu presencia me oprime el alma
Recordando aquellas ilusiones
Que fueron de mi vida la meta
Y que el tiempo las fue dejando
Cual sinfonía incompleta.
 
Lluvia que en primavera
Al posarte en el espacio infinito
Despiertas a la madre naturaleza
De su eterno letargo invernal
Abriendo sus pétalos la rosa
Y perfumando el aire de azahar.
 
Lluvia del caluroso estío
Que de repente te presentas
transformada en ruidosa tormenta
Y que a veces a mi niño despiertas.
 
Pero la lluvia es como el pan
Para los seres humanos vital
Sin ella no existiría la vida
El planeta se extinguiría.
 
Y a pesar de la eterna tristeza
Que me produce tu sonora presencia
En esos días grisis y en la tormenta
Ven a nosotros siempre con prudencia.
 
Y mañana detrás de las nubes
Allá arriba en la dorada cumbre
El sol volverá a brillar.
 
Fina