Esta preciosa panorámica de nuestro castillo y que además se aprecia en su conjunto la terraza ya citada, con el moviliario propio de la misma, y las plantas que adornan y embellecen; es uno de mis cuadros más atractivos por su luz y colorido, ya que predominan los denominados colores tierra de la fortaleza sobre el blanco de parte de algunos edificios y del interior de la barandilla. Del Castillo se contempla parte de la muralla y una de sus Torres, la de mayor altura, la Torre del Homenaje.
Hablar de este encantador lugar de nuestro pueblo, sería interminable por la belleza natural que encierra, y que jamás ningún pintor podría igualar. Es lo más parecido al Paraíso, en donde la divina mano agotó sus maravillas. Por todo ello y mucho más, dejaré que hable mi corazón de modo sutil y hermoso, tratando de describirla en el poema.
NUESTRO PATRIMONIO
Hay un lugar en Buñol
Fruto de la madre naturaleza
Expléndido de luz y color
Insuperable de belleza.
Mil veces lo visitamos
Admirándolo ávidamente
En sus mínimos detalles
A esta concavidad del monte
Conocida como la Cueva de Turche
Nuestro Turche es inconfundible
Y la honda huella de la impresión
que su grandiosidad preduce
Estremece de emoción.
Marco de entrada soberbio
Artístico y digno de estudio
Que ofrece a todo el mundo
Del alma la más pura expansión.
Presenta ya desde el camino
Que cerca de ella serpentea
Un escenario mágico, colosal
A donde se llega por el lecho
de un río con escaso caudal.
Río por el que de niña recorría
Hasta su precioso lago
Y su grandiosidad me parecía
El Mar Mediterráneo.
Desnudos peñascos la rodean
Y su bello conjunto semeja
Al de un gran Coliseo romano
Cuyos palcos y plateas fueran
Barridos por los años.
Aproximándose a la Cueva
Nos sorprende la caída del agua
Decoración sencilla y poética
De una natural cascada.
Los rayos solares en ella
Descomponiendo y quebrando
La luz, forma por refracción
Un pequeño arco iris multicolor.
La Cueva Turche de Buñol
Reune todos los encantos naturales
Que la Divina mano quiso darle
Confortando la voluntad y el ánimo
De cuantos se acercan a visitarle.
Así te veo yo, Cueva de Turche querida
Trasladando el pensamiento a mi pluma
Que jamás alcanzará tu hermosura
Tu majestuosidad y grandeza profundas.
Fina
El primero de los cuadros está muy bien logrado. Esa vista del castillo desde la terraza le da un aire muy realista.
ResponderEliminarEl segundo de ellos, el de la Cueva del Turche, me parece precioso, así como la poesía. Ambos hacen que mi mente recorra ese maravilloso lugar de nuestro pueblo, que es mi favorito sin duda.